Las principales características del producto de lujo son la +qcalidad, el valor cultural, la exclusividad, el precio, su no utilidad, su carácter emocional y su carácter anticrisis.
a) En relación a la calidad, el producto goza de dicho atributo pero el consumidor no compra un bolso de Hermes por las cualidades de la piel del mismo, sino porque su adquisición proporciona el placer personal de acceder a un fetiche del lujo reconocido internacionalmente y participar del glamour francés. Poseer este tipo de productos implica un gran reconocimiento social, el acceso a grupos selectivos y comunicar a los demás la posición que se ocupa en este mundo.
b) Es una ilusión, es el aura de la marca. No compramos calidad. El concepto de valor cultural, hace referencia a la antigüedad del prestigio de la marca llegando a formar parte de la cultura como un valor homogéneo que tiene el mismo significado para las distintas generaciones y es el mismo en todo el mundo. A modo de ejemplo, todos asociamos un Rolls Royce con lujo, seamos o no adeptos a sus productos.
c) Una imagen asociada a los privilegiados. Con el lujo se proyecta cierto estatus social. Las marcas de lujo intentarán diferenciarse de las demás firmas tanto en la personalización del producto como en la política de distribución, intentando que sea más exclusiva. La marca deberá esforzarse en la diferenciación y podría adoptar estrategias one-to-one.
d) El precio ha de ser elevado o muy elevado.
e) El consumidor no se plantea la utilidad del producto, sino si su reloj de muñeca es un símbolo de distinción; si su coche es un signo de status; si su teléfono móvil no es uno cualquiera; si su vestimenta es de la mejor boutique; si su lugar de vacaciones es una playa no masificada sino exclusiva.
a) En relación a la calidad, el producto goza de dicho atributo pero el consumidor no compra un bolso de Hermes por las cualidades de la piel del mismo, sino porque su adquisición proporciona el placer personal de acceder a un fetiche del lujo reconocido internacionalmente y participar del glamour francés. Poseer este tipo de productos implica un gran reconocimiento social, el acceso a grupos selectivos y comunicar a los demás la posición que se ocupa en este mundo.
b) Es una ilusión, es el aura de la marca. No compramos calidad. El concepto de valor cultural, hace referencia a la antigüedad del prestigio de la marca llegando a formar parte de la cultura como un valor homogéneo que tiene el mismo significado para las distintas generaciones y es el mismo en todo el mundo. A modo de ejemplo, todos asociamos un Rolls Royce con lujo, seamos o no adeptos a sus productos.
c) Una imagen asociada a los privilegiados. Con el lujo se proyecta cierto estatus social. Las marcas de lujo intentarán diferenciarse de las demás firmas tanto en la personalización del producto como en la política de distribución, intentando que sea más exclusiva. La marca deberá esforzarse en la diferenciación y podría adoptar estrategias one-to-one.
d) El precio ha de ser elevado o muy elevado.
e) El consumidor no se plantea la utilidad del producto, sino si su reloj de muñeca es un símbolo de distinción; si su coche es un signo de status; si su teléfono móvil no es uno cualquiera; si su vestimenta es de la mejor boutique; si su lugar de vacaciones es una playa no masificada sino exclusiva.
f) Un consumo emocional, visible y poco racional.
g) El sector del lujo es más estable, no se ve afectado por la crisis económica general. La razón es evidente: los ricos no sufren las crisis igual que la mayoría de consumidores, incluso a ellos les suele ir muy bien en épocas de crisis.